Crónica: Presentación Nueva Uniformidad, 'No basta con soñarlo, hay que hacerlo realidad'

La espera mereció la pena, el deseo de ver hecho realidad uno de nuestros más ambiciosos sueños, por más remoto que éste pareciera, vio la luz el pasado viernes 2 de febrero de 2018.

Rondaba abril de 2016, los primeros esbozos de lo que hoy es la nueva uniformidad de la Agrupación Musical Nuestro Padre Jesús del Amor comenzaban a coger forma sobre un papel en blanco, largas horas de trabajo y muchas ideas que iban y venían desde Jaén, nuestra imaginación comenzaba a sobrevolar los más recónditos lugares de nuestra mente, eran momentos únicos e ilusionantes que culminaron en 2017 con el diseño oficial de nuestra nueva uniformidad.

“Cofrades, familiares, amigos, músicos, bienvenidos todos a este concierto de presentación de la nueva uniformidad de la Agrupación Musical Nuestro Padre Jesús del Amor de Alhama de Murcia”.
Así fue la apertura del acto de la mano de D. Juan Pablo Molina Rueda, él fue quien realizo el diseño, el arquitecto de nuestro sueño, llevándonos de la mano en todo momento y culminándolo de la forma más brillante posible, presentándolo él mismo.

Marcaban las 20:00 horas en el Teatro-Cine Velasco, el patio de butacas estaba completo, la expectación era máxima; familiares, amigos, seguidores, así como una representación de las Cofradías y Hermandades a las que acompañamos en Semana Santa, no querían perderse el acto que iba a tener lugar.

En una primera parte, interpretamos las marchas “Perdona a tu Pueblo” y “Sagradas Vestiduras” con la uniformidad que desde el día 20 de octubre de 2013, ha hecho gala en todas nuestras actuaciones. Los sones de “Perdona a tu Pueblo” nos hicieron viajar al comienzo de todo, al origen de nuestra esencia, pues estos compases fueron los primeros que sonaron de nuestros metales en aquel frío otoño de 2013. Juan Pablo quiso destacar este pequeño gesto, señalando que:

“no ha sido necesario un nuevo uniforme para presentarnos ante ustedes, éstos jóvenes lo han hecho de la forma más humilde que se pueda hacer, mirando hacia atrás, mirando lo que son, vistiéndose con su ropa hasta ahora; así lo han hecho, porque así quieren ser recordados”.

En la segunda mitad, el telón se abrió para descubrir la nueva uniformidad al son de todo un himno de nuestro repertorio, “Mirando desde el Cielo”, acompañado por las ovaciones y exclamaciones de júbilo por parte del público asistente. Cuando la melodía se desvaneció, Juan Pablo procedió a explicar todos los detalles de la nueva identidad del Amor:

“Un uniforme de notable diferencia en cánones y tendencias actuales en la vestimenta de Agrupaciones Musicales, marcando un nuevo estilo, una ruptura de patrones para crear una simbología propia y reconocible”.
También señaló las particularidades que hacen de este nuevo hábito, una identificación sin precedentes del sello de la agrupación:

“Una guerrera casi tan larga como el cuello de un pelícano… el pecho goza de solapa ancha que recuerda a las alas extendidas de un pelícano”. “Rojas son también sus vueltas mangas, decoradas con un bordado arbóreo que recuerda a uno de los motivos que se puede encontrar en el banderín de esta agrupación”.

“Rosarium Mariae”, “Madre del Dolor” y el Reestreno de “Silencio”, dirigida por su autor, D. Luís Fernández Ramos, fueron las marchas que cerraron el acto de presentación de la nueva uniformidad, bajo los enormes aplausos y el cariño que nos llegaba desde el abarrotado Teatro-Cine Velasco.


Antes de concluir la ceremonia, quisimos tener unas palabras de agradecimiento para nuestro director general, D. Felipe Andreu Ortega, que tanta dedicación ha dispuesto a la gran familia que somos:

“Nos sentimos enormemente agradecidos de contar contigo en las buenas y en las malas, y que sin duda, el Amor que nos ofreces día a día es y siempre será la base que nos mantiene unidos”.
Para finalizar el acto y a petición del público, se interpretó el canto litúrgico “Dios está aquí” cerrando por última vez a lo largo de la tarde-noche, el telón del escenario.

Orgullosos y agradecidos de haber podido vivido este momento único y especial junto a nuestros familiares y amigos. Sobran palabras para describir todos los sentimientos y las emociones compartidas, que, sin duda, nos acompañarán a lo largo de nuestra historia, con una eterna sonrisa dibujada en nuestro rostro.